¿Maduro Maquillando un golpe de estado?

¿Asamblea Comunal Nacional, TSJ , Sublevación? El Burro Demente, aspirante a Dictador Nicolás Maduro, debería estar desde hace tiempo, recluido en un manicomio.

Maduro y esbirros, están presionando a sus vasallos del poder judicial, para impugnar elecciones, no se han atrevido a decidir, con cuál de los tres palos, romperán la lámpara, ni ellos mismos todavía lo saben, pero de no actuar ahora contundentemente para evitarlo, no tardarán mucho en consumarlo.A pesar de terribles consecuencias que un autogolpe acarrearía, Maduro y sus esbirros continúan deshojando la margarita, estudiando el conveniente maquillaje que usarían para reducir al mínimo el impacto internacional, que ocacionaría arrebatar a la torera, triunfo opositor, expresión de la voluntad de mayoría de los venezolanos. El impacto y desborde nacional, que esta medida dictatorial ocasionaría, pretenden controlarlo, a punta de represión, utilizando a sus esbirros de la guardia nacional, acompañando a jaurías de colectivos asesinos de psicópatas armados, no tienen, idea o no les importa el cataclismo y destrucción del país, que su criminal acción podrían generar; si lo entendieran, no habrían tomado atajo para un cruento final, que a partir de su derrota, han estado parafraseando.

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No sabemos si militares institucionales (si es todavía que queda alguno que no este preso), estarían dispuestos a apoyar una masacre de proporciones inimaginables.

Nicolás Maduro, barrido el 6D, con todo y partido, fue sepultado en un aluvión de votos opositores, pero en su fuero interno, nunca pensó, en aceptar con gallardía su estruendosa derrota.

Tramposa reingeniería electoral de un CNE totalmente parcializado, en esta oportunidad les jugo en contra, su Legión de electores virtuales conformada por: plagiados, muertos, super héroes, y comodines hasta con 30 cédulas, que habitualmente han utilizado en los conocidos “remates” después del cierre de la jornada electoral, no fueron suficiente.

A los abusos mencionados, debemos sumarle, los miles de millones sustraídos de arcas públicas para dilapidarlos, en una desproporcionada grotesca, corrupta y ventajista campaña electoral oficialista, utilizando recursos ilimitados para propaganda y logística para candidatos oficialistas, compra de votos y conciencias, psicoterror a empleados públicos y a beneficiarios de misiones sociales para que cumplieran con el 1×10, canaimitas, taxis, linea blanca, viviendas, comida, que para comprar votos de nada sirvieron. Como siempre en la proyección socialista del siglo XXI “el culpable es el otro”, quieren proyectar  y endosar sus 17 años de trampa, ventajismo, destrucción y vicios  al adversario.

La Dictadura, tiene las armas y el verdadero pueblo tiene la voluntad, los cojones y los votos . Si se atreven a robarnos el triunfo…Que Dios se apiade de Venezuela

Ruiz Pineda

Fuente: DolarToday

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